“Una vez que realizamos nuestros trabajos decidimos entrevistar a D. Alejandro Quesada Garrido, vecino de Iznalloz y doctor en Antropología social quien está en la actualidad escribiendo un libro sobre la historia de Iznalloz. Tuvimos la suerte de charlar con él comentar los trabajos que habíamos realizado y preguntarle algunas dudas o curiosidades que nos habían surgido durante la realización de los trabajos.

-Lo primero que nos había llamado la atención es la escasa información que habíamos encontrado al estudiar Accatuci. D. Alejandro Quesada nos explicó que ese vacío se debe a que no se han realizado excavaciones arqueológicas en aquellos lugares donde han aparecido piezas de interés. Por tanto tenemos piezas descontextualizadas, aunque algunas de ellas sean de gran valor como es el caso del Togado de Periate. No obstante, no es algo que corresponda sólo al período romano sino que, como nos indicó,  ocurre ese mismo vacío al estudiar el período íbero o la primera fase de la etapa de Al Andalus. También nos explicó que en muchas ocasiones no se han realizado las excavaciones porque son terrenos o fincas privadas, y como en el caso de Periate, los familiares no han dado su consentimiento.

-Hablando de Periate y de su Togado le preguntamos si él se inclinaba más hacia la consideración del personaje como un retrato de Claudio II el Gótico o de Decio. Nos contestó que es muy difícil afirmar que sea uno u otro, pero que cada vez hay más especialistas que encuentran más probable que se trate de Claudio II, no obstante nos insistió en que incluso podría tratarse de un personaje político anónimo importante en esta villa. Estuvimos hablando de la costumbre tan curiosa que tenían los romanos de aprovechar el cuerpo de las esculturas varias veces, de modo que iban cambiando la cabeza con los rasgos del nuevo personaje al que se estaba representando. Nos confirmó cómo esta costumbre todavía se utilizó más en el Bajo Imperio (s. II-III) momento en que se realizó la escultura del Togado, porque la economía estaba atravesando una fuerte crisis  y había que ahorrar todo lo posible, de ahí que el cuerpo de nuestro Togado sea de una mejor calidad, puesto que se esculpió con anterioridad al rostro.

-Otro tema que nos preocupaba era el no saber con exactitud la localización exacta de Accatuci. Estuvimos hablando de las distintas teorías que habíamos estudiado sobre su localización  pero nos extrañaba que cada teoría señalara puntos geográficos tan distintos e incluso con restos muy alejados en su cronología. Nos explicó que quizás habría que considerar distintas zonas que van tomando importancia a medida que avanza el Imperio. Así tendríamos una zona más antigua, en torno al actual Iznalloz (su puente romano es del siglo III ó II a.C) y que estaría creada precisamente por encontrarse en un cruce de caminos, y una zona mucho más reciente y distinta que destaca en el Bajo Imperio (s. II-III) que estaría en Periate.

-Por último hablamos de la diosa Ceres, diosa de la agricultura, creadora del cereal,  y del paisaje tan distinto que tuvo que tener Iznalloz con esos campos de cereales en lugar de los campos de olivos que hoy conocemos.

Fue una jornada muy interesante y entretenida la que pasamos con D. Alejandro Quesada, quien nos contó otras muchas historias sobre Iznalloz que estaremos encantados de leer cuando publique su libro.